CATALUÑA y 3

DISCURSOS DE MADERA

Los independentistas no tienen recorrido en sus declaraciones realizadas en los medios del Estado. Hablan de la independencia como si la misma fuera un estado de Dios y con ello habitar en el Paraíso. Y utilizo las mayúsculas para dar más rango al estado de psicosis en que se hallan estos pueriles mozos que sin saber de la historia sí desean no repetirla sino caricaturizarla.
El entramado del Estado de Derecho se halla en perpetuo estado (valga la redundancia) de UCI y quirófano, fallando en este caso la cirugía que se desea implantar a este conciliábulo de locos aún sin rematar pero a punto de estallar en una locura desenfrenada y colectiva.
Diálogo y sentarse por parte de dos locos (Puigdemont y quien acudiera del Gobierno de la Nación) nos puede llevar a todos a un manicomio de camas con cuerda y dejar en este caso sí la historia atada y muy atada. Pero en el caso de que brillase la cordura y se impusiese la razón no habría más que rendirse a la evidencia y de ese de modo dejar de tocar la corneta para ir a filas y matarnos unos a otros. Creo que con serenidad y cordura se puede reconducir esta torpe política y que, bien con mediación internacional o no, poner los puntos sobre las íes e ir haciendo lo que en los últimos treinta años no se ha venido haciendo, tal como reformar la Constitución pero no para favorecer exclusivamente a Cataluña sino también al resto de las Comunidades Autónomas de este país, con mayores cotas de autogobierno y competencias o decisiones, eso sí en materias que se pueden descentralizar, pero sin perder en todo lo demás la fiscalidad que debe competir a un Estado federal.
Es necesario también que cada Comunidad se someta a guardar, preservar y respetar todas las leyes que emanen de la Carta Magna firmadas por cada uno de los parlamentos que gobierna en el territorio del Estado Español.
Asimismo, derogar o reformar leyes que han quedado ingrávidas con el tiempo y otras que vienen perjudicando al conjunto de la población y cito ejemplos como la ley electoral o la laboral, entre otras.
En fin, un escueto y básico artículo de actuación para los que sólo hasta ahora hacen discurso de madera y por ende les crece como a Pinocho la nariz por mentirosos compulsivos. Y para acabar con esta murga, me lanzo estas preguntas y doy mi inicial veredicto: ¿Donde estaban los servicios de inteligencia que permitieron que urnas y colegios estuvieran abiertos con miles de papeletas?
¿Dónde estaban los mossos en todo este affaire, sin que hicieran nada para impedirlo?
¿Por qué Rajoy y su gobierno no impidieron todo este horrible error cometido sin responsabilidades políticas para que dimitan?
¿Cómo es posible que un referéndum ilegal se haya encaramado en las primeras líneas de la prensa extranjera sin que Rajoy y su gobierno sepan explicarlo?
Son muchas más preguntas, pero yo como todos los españoles estamos hartos de estos discursos de madera, al estilo Pinocho, que jalean mucho y hacen ruido y no dicen ni significan nada. Dimisión para todo el gobierno catalán y Dimisión para todo el gobierno español. Es mi petición sobre una opinión mía personal y de modo educado.