El mar ruge y llama al invierno,
con lluvia y brisa
la luna ilumina el momento.
Quiero encontrarte al alba
y sentir el agua a tu espalda,
sacudir el frío y unir nuestras miradas.
El ramaje de los árboles mira al cielo y
nos abraza o se vuelve esquivo,
no es clara su intención.
La noche inquieta y expectante nos tienta
y percibimos sus latidos con notas de amor encendido
Mientras el bosque susurra sus sonidos
el agua nos quita el peso y aligeramos nuestra sed y empeño.
Siento que se rompen las hojas
al crujir y aparece
la luz del nuevo día.
Todo es alegría y confusión
cuando nos invaden los datos
que me alejan, apartan o me acercan.
Y yo necesito la luz, el agua,
las ramas, el bosque,
el crujir de su arrullo,
tu cielo y tu abrazo.
Dedicado a Mar de Antón Martín
Novbre 2022
vicente montejano conejero