LA LEY DEL SILENCIO

Cualquier persona que desee comunicarse con su semejante es necesario que acceda a un diálogo, el cual nunca debe ser de sordos, a fin de propiciar por medio de la palabra, acuerdo, opinión, propuesta e incluso desacuerdo de aquella iniciativa, tema o asunto del que se trate. Algo tan básico y elemental como para llegar a un claro entendimiento no debe ser en ningún caso desechado cuando no aplazado sine die por cuestión de no interesarnos o por alguna razón que se oculta, y en ese sentido si se cae en un pleno silencio deberá explicarse del porqué se queda sin palabras sin eludir comentario alguno sobre tal mudez.

Todo este preámbulo sirva para concernir que la clase política dominante y subdominante entablan sus peleas estratégicas sin que la ciudadanía que les ha votado sepa en muchos de los casos por las razones de tales desacuerdos de los que no dan cuenta ni unos ni otros, y en caso de que alguna de las dos partes reclame audiencia causa paranoia, a veces, que lo que se subraye se convierta en soflama argumentaria que en nada se atiene a los parámetros de veracidad o reflexión con sentido a tener en cuenta.

Un ejemplo: el acercamiento ahora de presos de ETA al País Vasco o entornos cercanos, sirve de cancha política para los que durante décadas han permitido la corrupción en sus filas sin alzar sólo una vez la voz para denunciarla, sin embargo ahora son exultantes en pretender hacer creer que innumerables fraudes como disponer de una contabilidad B, no declarar a la Hacienda Pública, recepción de donativos ilegales de constructoras y entrega de dinero negro a los dirigentes del partido, tráfico de influencias, sobornos, extorsiones y otras malversaciones, han sido meros casos aislados.

Asimismo, se airean por parte de la clase política, las regularizaciones masivas de inmigrantes (hubo seis de 1985 a 2005; González legalizó 143.967, Aznar y su ministro Rajoy 453.891 y Zapatero 565.121), las deudas que dejaron o dejan gobiernos  preanteriores, anteriores, el actual, e incluso algunos aseveran ya como denuncias graves los vaticinios que hacen de los que gobiernen en su día sino son de su sigla política. En fin, todo un galimatías de sandeces generado por intrépidos videntes que además de modo insultante no autorizan a los demás pronunciarse de nada de nada, en tanto que ellos se desdicen en un contradictorio enigma cansino de estupideces programadas que anulan voluntades para acercarse a las urnas y volver a votarlos.

Tal como está la desafección política, son muchos a los que no les interesa que los que nos gobiernen consulten a la ciudadanía sobre cualquier aspecto que pongan en marcha, agregando que “todos los políticos son iguales”. Parece ser que aprovechándose de tal desafección, los consensos políticos en el Parlamento, bien se hacen por siglas, banderas e intereses espurios. Cualquier opúsculo que vincule la delincuencia con la corrupción política es ignorado, sin embargo se respetan decisiones políticas hoy día en base al opúsculo de un dictador que gobernó España cuarenta años y murió hace cuarenta y tres. Para obviar la memoria histórica se forja una ley del silencio que recrudece injusticias de entonces no penadas, al mismo tiempo que se tiñe la dignidad, obligando a ser políticamente correcto a fin de dejar correr la precariedad en el empleo y los abusos que el poder ejerza, cambiando sutilmente la historia y hacer de la misma una horma a su medida.

¿Estamos en una democracia o en un país forzado?. El 18 de agosto de 1936 se asesinó a Federico García Lorca, ochenta y dos años después, sigue sin aparecer en una fosa común mientras que Franco yace en un mausoleo. Con cierta ironía, hoy día hay quienes se atreven a asegurar que la ley mordaza cambiará su titular y se impondrá por otro más cinematográfico, tal como La ley del silencio, cuya figura estelar era Marlon Brando, pero en vez de protagonizarla Casado, Rivera.., se baraja que sea alguien más duro, ¿Adláteres del abad del Valle de los Caidos o de la Fundación de Francisco Franco?

SI ALGÚN DÍA

Si algún día el vuelo de mi vida aletease bajo sin hallar las huellas del camino que me conduzca hacia ti,  redoblaré mis esfuerzos para que mi imaginación no se funda con el olvido de la ruta emprendida. Experiencias ajenas me avisan ha tiempo de que los abismos se entrecruzan enseñándonos sus fauces y que la turbiedad rompe inexorablemente las aguas cristalinas de la vida.

Si algún día iniciase ese roce con la pérdida del tiempo y mi existencia se hiciera opaca a la luz de la tierra, que la energía convertida nunca empañe la marcha sideral de nuestra galaxia y pueda así ser artífice de un nuevo mañana en cualquier estrella fugaz o estadía láctea, a fin de poder seguir soñando acompañado del fulgor astral y de eternos espacios por recorrer asidos a los recuerdos.

Si algún día sin aviso dejara de contar los días por quedar impávido ante la muerte, que al menos sepas que mi alma flotante seguirá navegando en búsqueda del horizonte en que tu figura se alce en un límpido reflejo  amanecer y de ese modo  visualizar tus manos tendidas y lograr ese deseoso abrazo cálido que pueda llevarme a ese litoral lacerante de luz y esperanza.

Si algún día llega, que la aurora boreal me acompañe al crepúsculo dorado donde las fundas del mañana guarden con sentido todo mi pasado en un cofre de cuero,  días de oro, plata, bronce y chatarra, que aluden al brillante desdoro de dichas y desventuras de un pasado roto por los avatares de un futuro que nos lleva de donde partimos hacia un presente que siempre es futuro.

LA ENFERMEDAD SUBLIMINAL DE BAIONA

Baiona está enferma, apostilla un parroquiano.

¿De qué?, pregunta el portavoz del gobierno municipal.

No sé pero hay que enviarla a Urgencias, aduce en un ejemplo de prolepsis el avezado parroquiano. Y sin más, dicho y hecho.

Procuradores de Sabarís, Bahiña, Baredo y Belesar, a los que se unen otros del centro de Baiona, trasladan el cuerpo de la Villa Real al ambulatorio de Almuiña, quien asiente y empieza a explorar. Como su diagnóstico produce controversias se incorporan especialistas de las distintas ciencias médicas y enumeran causas, efectos y recetas.

“¡Uy, uy, uy!. Cada una de las glándulas secretorias de la orina tienen malformaciones en calles, plazas y alamedas, sobre todo cuando llega la estación veraniega, no dando mucho de sí, contenedores malolientes, con ausencia de baldeos en calzadas y aceras”, diagnostican quienes revisan los riñones.

“¡Puf!.  La cala pulmonar de Baiona se ha visto atacada por el tumor del hormigón y su asimétrica morfología. Cuando no edificios sin visos de acabar o ubicados en plena estructura paisajística hace que se hayan esquivado lugares de gran esparcimiento paisajístico, retranqueándose un paseo para que estacionen vehículos en primera línea del litoral y tal medida crea retenciones y polémicas”, avisan los del pulmón.

“¡Ay, que no veo!. El órgano de abertura y visión padece del mal de ojo, con presbicia, astigmatismo y cierta miopía que produce oscuras impresiones cuando alzas la vista hacia el Parador y no ves iluminación alguna; lo mismo ocurre con  monumentos de interés. pasos de cebra o aledaños de la Villa. Y ni hablar de terrazas o balcones del casco histórico, con severas cataratas”, aseveran los oftalmólogos.

“¡Carainas!. La cabeza padece migrañas y cefaleas tensionales y quienes mandan técnicamente en el cerebelo del Consistorio producen sordera y depresiones en gran parte del vecindario. Regidor y corregidores deberían adoptar pautas y separar las funciones de cada hemisferio, el lado técnico no superponerse al político en ninguno de los haberes sociopolíticos”, asegura el neurólogo

“¡Tate!. El sistema bucal debe regularse con mucha limpieza, a fin de evitar caries y proclamas nada audibles, manteniendo prudentes silencios y hablar cuando se debe, evitándose faringitis agudas por el hecho de farfullar, excluir o dinamitar con halitosis al que envidias o piensa de modo distinto al tuyo”, trazan los odontólogos.

Para hombros, manos y caderas, los especialistas en reumatología, traumatología, físios y rehabilitadores coinciden en su recetario y son muy claros; “hay que medir a tus adversarios no por su altura social sino por lo que sugieren o hacen y por aquello que dicen que hacen y no hacen; la manos mejor vacías y no llenas de algo que no sea tuyo; las caderas se debilitan por estar muchos años sentado y aforado en la política, sin ejercer profesión alguna  ya que ocasiona hernia discal, lumbago, ciática y artrosis, así como cansancio en los que soportan tus averías”.

En Medicina interna, mera atención al digestivo y el colon; se recomienda “no acostumbrar al estómago a realizar asuntos indeseables o comer de modo ingente a costa del erario público”.

La mejor recomendación terapéutica es foguear las piernas, para lo que es necesario andar mucho por el mundo, viajar  para conocer más a fondo lo que pasa fuera de la villa y de ese modo ver, escuchar y reconsiderar todo lo que nos rodea y que pueda ser útil para la hermosa bahía y villa de Baiona.

 

Vicente Montejano Conejero