En una atalaya de Monte Boi
entre el Palacio de Malpica
y la Torre del Príncipe
avistaba la ensenada
playas de los Frailes,
Concheira, Ribeira y Barbeira
por donde una higuera
andan las raíces de mi sangre y mi casa
De tránsito, ella de las Cíes,
la blanca y pálida,
y él de verde esmeralda,
de la Palma
Pero yo nací en el Castillo,
el antiguo y noble del Viejo Erizana
¡Qué triángulo el mío!,
¡qué trío de savias!
¿qué tres cunas de gaitas
mecen mis nanas?
Tras la Torre del Reloj
por las calles de los Clérigos,
del Pescado, Plaza Vieja y del Canto
¡Cómo me gritan, lloran, hieren,
puéblanme y alzan,
cómo me tiran, amor del alma
Cíes, Fortaleza y Palma.
(Poemario de Vicente Montejano Conejero)