TODO AQUELLO QUE NO VEMOS

Todo aquello que no vemos nos transforma (y de otro modo lo que conocemos)

Hay cosas que solo podemos ver en la obscuridad (y otras no a la luz del día)

Estimo que todo aquello que no vemos pese a que estemos rodeados de esa imperceptible presencia es lo más importante y con más vida que todo aquello que a simple vista vemos y creemos que por verlo tiene más visos vitales.

Sin embargo, no es así, el misterio de la vida está allí superpuesto a una obscuridad asemejada pero donde se halla la mayor claridad de las cosas que nos rodea.

Sin sol, no percatamos nitidez, pero sí el fulgor de las estrellas. Somos seres advenedizos y, a veces, estamos ajenos a la vida de los cometas, tan efímeros como nosotros, con inteligencia quebrada y el rumbo perdido.